Aunque vivir en una nación como Israel supone una aventura cultural en la que se tiene contacto con modos tan diferentes de ver el mundo, también es una oportunidad para entender que existen lenguajes universales que trascienden las fronteras culturales y comunican a las personas, casi sin importar sus contextos.
Uno de esos lenguajes, el audiovisual, es un campo fértil en el que afloran ingeniosos mensajes que cautivan, sin importar su origen. Este video, un comercial hecho en Israel, es muestra de ese ingenio que produce admiración y hasta saca una sonrisa sin necesidad de leer el hebreo.