El norte de Israel concentra una gran parte de la población árabe del país, la ciudad de mayor extensión que alberga principalmente comunidades árabes cristianas y musulmanas es Nazaret.
La singularidad de Nazaret frente a otras ciudades israelíes es perceptible desde el momento en que se alcanza a divisar desde la carretera que conduce a ella. La arquitectura, el transporte, el vestuario, la mirada de la gente y sus actitudes frente a los extranjeros crean un ambiente diferente comparado con otras zonas de Israel.
Desde las empinadas y estrechas calles de la ciudad se observa como predomina el estilo de vivienda árabe caracterizado por la ausencia del techo de tejas, esto debido a que muchas familias tienen por tradición construir pisos adicionales destinados a las nuevas familias que los hijos varones establecen con el paso del tiempo.
A diferencia de la mayoría de las ciudades israelíes el idioma árabe predomina ante el hebreo en los avisos de las tiendas, la publicidad y en los nombres de instituciones o edificios en general.
Las fachadas de piedra rústica y ladrillos de color claro son muy comunes en la zona antigua de la ciudad donde se encuentran la Basílica de la Anunciación y Iglesia Ortodoxa Griega de la Anunciación las cuales poseen una arquitectura exterior que mantiene el estilo de la ciudad aunque conservan algunos detalles propios de las iglesias católicas.
El lugar donde, según la tradición cristiana, le fue anunciado a María el nacimiento de Jesucristo, no es el mismo para los católicos romanos y para los ortodoxos griegos, esto se debe que haya dos templos que reclaman guardar el lugar donde tuvo lugar la Anunciación. La iglesia ortodoxa griega es la edificación más antigua, construida en el siglo XVIII. La riqueza artística de estos santuarios sobresale en sus pinturas, vitrales, techos y murales llenos de color
La presencia de mujeres con trajes largos y cabello totalmente cubierto es aún más común en las calles de Nazaret que en otras ciudades de Israel, así como los hombres que usan la Guthra o pieza hecha de algodón que cubre la cabeza y se ajusta con un grueso cordón negro denominado Igal.
Conversando con algunas personas que trabajan en tiendas y mercados de Nazaret, noté la dificultad con la que hablaban el hebreo ya que para muchos de ellos la vida transcurre sin tener mayor contacto con las demás culturas del país en especial la hebrea. Tal es el caso de Ahmed, un comerciante que tiene su negocio en la zona antigua de la ciudad y cuya familia se ha dedicado por generaciones a la comercialización del café.
El producto lo importa de países como Kenya, Colombia y Costa Rica, y es dentro de la misma tienda donde se lleva a cabo el proceso para eliminar la cáscara del grano y tostarlo con una modesta máquina. El café ya tostado es puesto en dispensadores especiales con el nombre del país de origen y en el momento de la compra es molido y empacado .En la cultura árabe hay toda una tradición alrededor del café que se prepara especialmente concentrado y poco dulce. Al fin y al cabo, el mundo occidental le debe a los árabes el descubrimiento y el disfrute del café.
Por su carácter cristiano y musulmán Nazaret se podría considerar como un micro país que ha conservado su identidad religiosa y cultural siendo a su vez parte del estado judío de Israel.